
Esto es un milagro una representación deforme, aglomerada y sin plataforma.
La vida misma no se mira de frente, no se expande como el entero universo volviéndola claridad y suplicante armonía, fuera del frió y el ardor del dolor.
Una paz sin secante, un milagro eterno y señero, un retroceso vulnerable y sutil, una lactancia sin desobedecer sapiencia
la vida es un calostro eterno, es una solo exhalación, el espacio es solo un subterfugio…
Todo lo hemos creado, destruido y conjeturado reiteradamente.
Henchidos de riquezas, citamos culpas.
Lo que no concibes de reinado, lo acumulas en desamparo
Del cáliz de energía, te embriagues inmutable.
Hay pasados que no te erigen honesto.
La luz se desmaya y cae frente cada sustento. Drenar el poniente, somos frutos de un árbol muerto. Hambruna aserrucha (jajajajajajajajajajaja).
Entre esto y lo que nos comerá, inocente último rayo de sol.
Sin advertir nos vomita un parlamento y asamblea, niega si no haz omitido nada, anclar la sutileza de un espacio latiendo fuera de este armazón sin oxigeno, si ignoro y auto acumulo lo que rebuzne. Como un doble que exprime dulce y trémula desnudez, flagelos se abren como abejas en una colmena y se hace obvio y me retraso entre esta noche en transición.
Soy la gran puerta, tendré miedo a toda noche. Compre mi propia alma para encarcelarla.
A la muerte que me da cada crepúsculo, te veo venir en un verde marchitado.
Verde marchitado me harás reina.
Sonido omnipotente no me deja florecer en avenencia.
Dame un cerebro comercial.
Como un arma mortal que no tengo frió ni miedo.
El mas adinerado no es el que necesita menos, es un obrero que se prostituye al narcótico.
Soy un sedante, una morfina de hielo.